Crítica: Celeste & Jesse forever
“Celeste & Jesse forever” de Lee Toland Krieger, tiene un toque que recuerda a “500 con summer” aunque sólo una pincelada. Se trata de una sencilla y encantadora comedia/drama (a fifty fifty) romántica que nos habla básicamente de dejar marchar, pero también reflexiona sobre la posibilidad de que una pareja funcione, es también una asunto del momento en que esas dos personas se encuentren, más que de la intrínseca compatibilidad. Y no sé si eso será cierto o no, pero aquí ésta idea está bien relatada y de alguna forma compramos la reflexión que se nos dibuja, en el metraje de esta efectiva y nada pretenciosa historia. La peli está narrada con un buen ritmo, con elegancia y unas buenas dosis de música que van amenizando como el mejor toque de sazón. Con un efectivo y químico reparto, Rashida Jones está tan encantadora que te la comerías (con o sin patatas) y un Andy Samberg que la secunda con una compatibilidad real en sus interpretaciones. No diré que se trate de una peli memorable ni mucho menos. Pero es una de esas, que si la ves sin una alta expectativa, sin pedirle demasiado, es un filme que entra muy bien. Sencillo y fresco.